Trotsky, Leon, La situación militar

Bibliografía
Trotsky, Leon, La situación militar, Informe ante el Sexto Congreso de los Soviets (9 de noviembre de 1918), MIA.org, 2014. Disponible en: https://www.marxists.org/espanol/trotsky/1918/9xi.htm

Formas de la violencia

Disciplinas
Elementos de la violencia
Tema

El propósito de Trotsky, como Comisario de Guerra y Presidente del Consejo Superior, es informar a los soviets que sesionan en su Sexto Congreso (Período 1917-1933) sobre la situación militar y los partes de guerra de los diferentes frentes que se libran en el país. Esencial es la caracterización que hace en su informe político-millitar del proceso de consolidación de la fuerza bélica del Ejército Rojo (de su debilidad y crisis inicial –en torno a su abastecimiento y la formación de cuadros de mando- a su fortalecimiento con la integración de los Comisarios revolucionarios –jefes proletarios militares para el control político y la formación revolucionaria del ejército-).

Resumen

Esencial para Trotsky es caracterizar al Ejército Rojo como un cuerpo valiente y disciplinado ante el poder político revolucionario inmisericorde contra los que lo traicionan. Señala puntualmente que el peligro contrarrevolucionario externo deviene de un enemigo disímil: en el frente norte, la coalición anglo-francesa imperialista y los checoslovacos, y en el frente sur, las bandas de cosacos y guardias blancas. Para él la militarización total del país es esencial (fábricas, sindicatos, organizaciones sociales e instituciones gubernamentales).

Para él las imágenes de la propagan revolucionaria son esenciales para la disgregación de los ejércitos imperialistas y provocar el pánico en los medios de comunicación burgueses. La exposición de este informe es sociológica e histórica.

Trotsky expresa que es esencial para la defensa de la revolución socialista el fortalecimiento político y armamentístico de un ejército regular, a la vez que, reconoce la importancia (de su actuación en el frente ofensivo y en la retaguardia) y el peligro (por su insubordinación) de los destacamentos guerrilleros revolucionarios.

Caracterización de la violencia:

Por lo que Trotsky plantea acerca de la Instrucción Pública soviética podemos vislumbrar el ejercicio de una violencia política para consolidar la ideología de los grandes líderes socialistas mediante el despliegue infraestructural de monumentos artísticos impregnados de los elementos estéticos iconográficos de vanguardia, en esos momentos, inherentes a la clase dominante –proletaria. Tarea encomendada al socialdemócrata internacionalista Lunacharsky.

El poder soviético revolucionario ejercía una violencia clasificación social para que el Ejército Rojo estuviera constituido principalmente por el sujeto obrero-campesino. Bajo la lógica de esta violencia al interior del ejército se clasificaba a los verdaderos revolucionarios –militantes disciplinados que no temían a la muerte- y a los traidores-desertores –que ideaban sabotajes o abandonaban el campo de batalla. Hacia el pueblo ruso en general esta violencia clasificaba como contrarrevolucionarios a aquellos agitadores de derecha e izquierda que atentaban contra el ejército y el poder soviético.

Citas textuales:

“A medida que la clase dominante comienza a utilizar el poder para objetivos militares, pasa del artesanado guerrillero a la edificación metódica del estado, y debe crear un ejército regular.”

“Cada comandante guerrillero consideraba su unidad, su destacamento –rebautizado después por él mismo división-, como un mundo cerrado. Exigía a los soldados de su división una disciplina severa, incondicional, y a menudo sabían mantenerla. Pero al mismo tiempo no era disciplinado frente a las instancias superiores.”

“Si, nuestro ejército se apoya en los comisarios, y puesto que en ellos descansa, podemos llamar a nuestro régimen revolucionario régimen de comisarios. Si nos dan comisarios bien aguerridos, capaces de morir, nuestra causa estará en buen camino.”

“Si queremos no sólo conmemorar el primer aniversario de la República sino defender el poder soviético, conquistar el futuro de la clase obrera y del campesino trabajador, nos vemos obligados en estos tiempos crueles a ser implacables con cualquiera que en nuestras filas, y una vez situado en un puesto responsable, no despliegue el máximo de energía, de valor y de firmeza.”