A Trotsky, como integrante de la dirección revolucionaria soviética, le interesa justificar ante el sujeto académico (instructores y alumnos) y la élite soviética la necesidad política imperante de la puesta en marcha de la institución encargada de formar en la técnica militar al pueblo ruso: la Academia Militar (Período 1917-1933).
Mediante un discurso eminentemente político rechaza el academicismo escolástico del viejo ejército al plantear que la educación militar y la educación social son procesos de conocimiento que se complementan recíprocamente para posibilitar la creación del aparato de mando del nuevo ejército especializado en los métodos de la guerra moderna.
Para Trotsky el pueblo de Rusia, los trabajadores, los soldados y los campesinos, debe ser educado en el hábito de la iniciativa individual orientada por el interés de la comunidad y de la distribución eficaz de la comida y los pertrechos para el ejército. La formación de los nuevos liderazgos militares soviéticos parte de la complementariedad entre la política y la guerra, entre la educación y la técnica.
Los obstáculos a remontar por la Academia Militar eran tres: el estancamiento técnico inherente a la debilidad económica, la ignorancia y pobreza de los campesinos y obreros, y el aparato de mando militar sin base social. De la personalidad vandálica de la primera fase de la revolución a la personalidad comunitaria de la fase consolidativa de la misma, Trotsky plantea desde una perspectiva histórica, el desdoblamiento de un proceso espacio-temporal de concreciones políticas.
Caracterización de la violencia:
Para Trotsky la violencia de guerra es una violencia política y el ejército sería el instrumento de ambas. En este sentido, la academia sería la institución esencial del ejército y la política. El elemento de esta violencia que Trotsky resalta es el de la técnica bélica ligada al desarrollo de la industria –economía- y la ciencia militar.
Citas textuales:
“En otras palabras, la guerra, también, es la actividad política, realizado a través de medios duros de sangre y de hierro. Y eso es cierto. La guerra es la política y el ejército es el instrumento de esta política.”
“La academia es una institución que se necesita para el Ejército, y por lo tanto por la política.”
“Nuestra tarea consiste en ajustar la personalidad de la comunidad, para que se sienta que no es un número, ni un esclavo, como lo era antes”
“Nuestra educación social, la educación militar inclusive (y digo “nuestro” sentido “de nuestra época”), consiste en hacer que todos los trabajadores, soldados y campesinos entender a la comunidad que sirve a sus propios intereses, y sólo a esos intereses.”
“La comida es mal distribuida, no aquí, porque la burguesía, o los nobles, o el Zar se han apoderado de él, sino porque los campesinos y los trabajadores no han aprendido la forma de distribuir adecuadamente. De esto podemos concluir lo siguiente: es necesario aprender.”